INTENSIVOS DE CHAMANISMO

Empecé el camino impartiendo la Rueda de la Medicina Inka, pero mis talleres han derivado simplemente a ser Intensivos de Chamanismo. Sigo basándome en la Rueda de la Medicina Inka, pero a ella le voy sumando técnicas aprendidas de otras formaciones y de otras culturas: huna, tolteca, lakota…

Empezar la Rueda Medicinal es iniciar un viaje de conocimiento y sanación profundos, tanto para un@ mism@ como para los demás, sanando las propias heridas del alma y aprendiendo a amarnos a nosotr@s mism@s. Es transformar las emociones y las energías pesadas derivadas de estas emociones, como pueden ser la rabia, la vergüenza, los miedos, la pena, la soberbia, etc., en sensaciones ligeras y nuevas perspectivas. La Rueda es un círculo que, siguiendo las 4 direcciones, nos ayuda a dejar atrás el pasado, liberando todas aquellas emociones y recuerdos que nos limitan, que no nos permiten avanzar.

PRIMERA DIRECCIÓN. EL SUR, EL CAMINO DEL HÉROE.

Aprenderemos y configuraremos una misha medicinal, convirtiédonos en hombres y mujeres medicina, en Guardianes de la Tierra. 
Al Sur, en compañía del arquetipo de la Sachamama o Serpiente, sanamos las viejas heridas y aprendemos a dejar atrás el sufrimiento, entendiendo e integrando todo aquello que nos ha pasado en la vida. Es un camino de conexión con nosotr@s mism@s, un camino de búsqueda interior y de sanación, de reconocimiento de nuestras sombras y heridas para empezar a caminar libres de cargas emocionales, totalmente renovad@s. es aquí donde aprendemos la técnica de Iluminación Chamánica, a través de la cual limpiamos nuestro cuerpo de energía luminoso, nuestros chacras, nuestra mente, nuestros corazones, nuestras emociones, y aprendemos a sanar a otr@s. También recibimos unas iniciaciones, las de las 7 semillas, y cogemos el compromiso de vivir desapegados, sin sufrimiento y sin juzgar, sin esconder lo que somos, quienes somos y hacia donde vamos. Aprendemos también a recapitular, cortando lazos y recuperando nuestra energía drenada durante nuestra vida. Nos hacemos “nuestra” nuestra pluma, aprendemos a hacer limpiezas lakotas con la pluma, encontramos nuestro punto de anclaje, trabajamos con nuestros chacras y viajamos en busca de nuestro animal de poder.

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SEGUNDA DIRECCIÓN, EL OESTE.

Al Oeste, en compañía de Otorongo, Hatun Puma, el gran Jaguar, conocemos el camino de la impecabilidad. Es en esta dirección donde transformamos nuestro miedo, nuestra rabia y nuestra sombra. Es la dirección en la cual trabajamos nuestro árbol genealógico, nos reconciliamos con todos aquellos que han sido nuestros enemigos en alguna etapa de nuestra vida, aprendiendo a caminar sin adversarios. Aprendemos a hacer extracciones de energías fluídicas (entidades) de nuestro campo de energía luminoso. Aprendemos también la técnica de tapping. Vamos en busca de nuestro mineral de poder, no iniciamos en el arte del acecho, sanaremos 3 encarnaciones, tomaremos conciencia de nuestras fugas de energía, experimentaremos la “Pequeña Muerte” y el renacimiento, cortaremos lazos con 3 de nuestros ancestros, liberándonos de sus cargas, y veremos estrategias de intervención para el manejo de la rabia y la tristeza
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TERCERA DIRECCIÓN. EL NORTE, ROYAL KENTY, COLIBRÍ.

Así, caminando con impecabilidad llegamos al Norte, en compañía de Royal Kenty, el Colibrí, en el cual descubrimos y reconocemos al Maestro Interior. Aquí, aprenderemos a recuperar el  mediante la técnica de “Rescate del Alma”, aprenderemos el arte del buen morir, ritualizaremos el tambor chamánico, aprenderemos la técnica de Iluminación de los 7 Centros de Poder y experimentaremos la Gran Muerte Chamánica, con el epitafio, el testamento y la despedida de los seres queridos. Es en el Norte donde dejamos atrás a nuestros maestros, y nos reafirmamos en el compromiso con nosotr@s mism@s y nos deshacemos de todas nuestras máscaras y roles que nos han acompañado des de que éramos niñ@s hasta el día de hoy. Trabajaremos también con los anclajes, que nos permitirán usar la técnica de desestructuración, experimentaremos las cuatro percepciones del rostro,  Asumiremos nuestra propia maestría.

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CUARTA DIRECCIÓN, EL ESTE. EL ÁGUILA-CÓNDOR.

El Este es nuestro Renacimiento, el principio de un nuevo ciclo, adquiriendo la visión del Águila-Cóndor, observando nuestra vida des de otra perspectiva. Hacemos un repaso del camino recorrido hasta ahora, vamos a descubrir al Sabio que tenemos dentro, aprendemos a adueñarnos de nuestras proyecciones, llevamos a cabo la práctica de la mente, y la indagación de ella, practicaremos la alquimia indígena. Finalmente, aprendemos los rituales de transmisión del linaje Inka.

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La Rueda es un camino de compromiso con uno mismo, y cada uno llega donde quiere llegar, según su propio grado de compromiso. Todas las iniciaciones que se reciben son del linaje Inka, aunque muchas técnicas vendrán de otras culturas y tradiciones. Esta es la verdadera riqueza: el conocimiento y la unión de todas las culturas. Vamos a ser uno!!!








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